Ha pasado una semana desde el final de nuestra estancia en el Mercado Navideño,
la Rambla de Almería luce distinta con y sin luces de navidad.
Toca aflojar el ritmo y recuperar fuerzas (y estabilidad personal) después de unos meses de colaboración, decisiones y preparativos.
Una experiencia llena de anécdotas, frío atípico para esta ciudad,
y compañeros increíbles dispuestos ha convertir los ratos de espera al público en agradables momentos mucho más llevaderos.
Días de ver amigos que pasan a saludar,
o a llevarse un MOMENToCOMPLEMENTo Designs para regalar,
días de prisas y de gente que viene y va...
Aunque sin duda, a sido una experiencia enriquecedora GRACIAS a toda esa gente que se acercó a conocernos,
se ilusionó con nuestro trabajo tánto cómo nosotras y apostó por regalos únicos elaborados con el corazón...
¡Feliz año de ilusiones y planes, a comerse a bocaditos el 2017!
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